La semana pasada obtuvimos malas noticias por parte de Netflix, la compañía de streaming anunció la cancelación de la serie Sense8. Esta es tal vez, una de las mejores series hasta el momento de Netflix y aun así, fue cancelada.
No es la primera vez (y tal vez ni la última) que ocurre algo así en Netflix, series como: Hemlock Grove, Marco Polo, Lilyhammer y The Get Down, han sido víctimas de la cancelación abrupta por parte de la productora.
Lo extraño en todo esto es que, no sabemos el motivo de la cancelación. En otras compañías se anuncia la cancelación junto con las cifras de audiencia que tuvo, sin embargo, Netflix nunca ha mostrado tales cifras, ni mucho menos da motivo alguno para su cancelación.
En consecuencia a estos movimientos que se han presentado por parte de la compañía, el presidente de Netflix, Reed Hastings, dio a conocer los motivos de estas cancelaciones. Hastings explica que, las razones para la cancelación de las series se debe a que, el servicio de streaming ha sido una racha de éxito con tanta series exitosas. Así es, la cancelación es porque el show es demasiado bueno.
“Nuestra proporción de aciertos es demasiado alta en este momento”, dijo Hastings. “Así que hemos cancelado muy pocos shows … Siempre estoy presionando al equipo de contenido: tenemos que correr más riesgos, hay que probar cosas más locas. Porque deberíamos tener una tasa de cancelación más alta en general. “
El presidente de Netflix explica que, no simplemente quiere cancelar más shows pero que prefiere tomar riesgos para encontrar esa serie que sea todo un hit, como lo fue la reciente 13 Reasons Why. Lo que cuesta trabajo entender es que, la compañía ya cuenta con series con excelente contenido ¿por qué cancelar esas series?
Según Hastings explica que es para empujar a las casas productoras a desarrollar contenido aún más audaz, original y creativo… ¿pero, se debe hacer a la costa de cancelar series con ya un alto nivel de calidad?
Aunque Netflix nunca revela la cantidad de personas que ven un programa, Hastings admitió que la cantidad de gente viendo la serie afecta drásticamente la fórmula que la compañía utiliza para decidir que shows se quedan y cuáles se van.
Este tipo de movimientos solo nos deja con la incógnita de qué otras series recibirán el mismo tratamiento y hasta qué punto Netflix va a conseguir dar buen material en un futuro, ya que no deja que sus series actuales crezcan en sus espectadores.
Sin duda esta estrategia que es poco común y que parece que va en contra de los que los fans piensan de sus shows favoritos, es hasta cierto punto preocupante, ya que los fans pagan por el servicio de Netflix esperando algo diferente a lo que comúnmente está en televisión o cable.
